viernes, 26 de septiembre de 2008

Dani, un tipo de suerte

Desearía que los distribuidores nacionales dejaran de ponerle títulos idiotas a las películas. El nombre verdadero de esta es Dan en la vida real, y aunque no sea el más inspirado de la historia, es mejor que el que le pusieron, un genérico que nada dice y poco tiene que ver con la película.
Bueno, al grano: la película es genial. A mí me encantan las comedias románticas, y hace rato que no veía una realmente buena. Es decir, una donde los protagonistas tienen química, donde uno entiende por qué los personajes se aman, donde los obstáculos para el amor son verosímiles y donde los chicos son graciosos (¿suena tan fácil, no?). Dani, un tipo de suerte tiene todo eso, y no me sorprende: está dirigida y co-escrita por Peter Hedges, el mismo que hizo el guión de Un gran chico y dirigió Fragmentos de Abril. Todas películas donde la familia y la soledad son el tema central, pero desde un lugar inteligente, piola.
Aquí, un viudo con tres hijas adolescentes va a pasar unos días en casa de sus padres, junto con el resto de su familia. En el camino, conoce a una mujer que lo deslumbra. Y cuando llega a la casa, se encuentra con que es la novia del hermano.
Steve Carrell la rompe con un tipo de personaje mucho menos extravagante que los que usualmente hace, y haber elegido a Juliette Binoche para su co-protagonista fue una genialidad. Las estrellitas jóvenes norteamericanas que hubieran puesto en su papel no tienen ni la mitad del encanto que la Binoche.

Pensamientos bestiales del caso:
  • ¿Dianne Wiest comparte cirujano con Meg Ryan? Una pena, se arruinó la cara.
  • La música es fabulosa. Ya me bajé el soundstrack y todo.
  • Sobre ese tema: Steve Carrell en un momento canta "Let My Open the Door", acompañándose con al guitarra. ¿Qué corno tiene la música que hace que todo te impacte mucho más fuerte? Lejos, uno de los mejores momentos de la película.
  • La subtrama de la hija del medio del protagonista es fabulosa. Está enamorada perdida y locamente de un compañero de colegio y grita, llora y reclama a su padre para que lo deje verlo. Brittany Robertson (que hace el papel) está genial haciendo de esa adolescente asquerosa y molesta, pero lo mejor de todo es como esa historia hace eco sobre la principal. Cuando Shakespeare hace cosas así, lo llaman genialidad. Si lo hace una comedia romántica yanqui, lo descartan como banal.
  • Lo más hermoso de toda la película es que es un encanto. Creo que tuve una sonrisa en lso labios todo el tiempo, causada por la ternura, por el humor, por el candor de los personajes. Aunque hay una enorme familia en pantalla, los responsables de semejante logro son Binoche y Carrell.

Diagnóstico a lo bestia:

Divina (uso esa palabra aunque Cutti me reprende cada vez que lo hago -- la verdad es que es el adjetivo que mejor le queda). Calculo que se sumará a la lista de películas que cada vez que engancho en el cable me quedo mirando con puro placer y me hacen llegar tarde adónde sea que tenga que ir.

Donde la vi: Hoyts Abasto.
Cuando: jueves a la noche.
Con: Cutti.
Gente: Mucha parejilla. Los dos idiotas a mi izquierda no pararon de hablar, y encima la mina tenía una risa muy molesta.
Comiba/bebida: Nada de nada.

miércoles, 24 de septiembre de 2008

[●REC]

¿Se acuerdan cuando El proyecto Blair Witch la rompió? Depsués vinieron Cloverfield, El diario de los muertos... ¿Se nota el patrón? Películas filmadas emulando ser una filmación casera.
La verdad que siempre la rompen (bueno, El diario de los muertos, no tanto). Pero al margen de lo buenísima que es [●REC], quiero contar algo personal.
La cámara en mano me marea. Mucho. Muchísimo. Hasta me mareó el principio La escafandra y la mariposa. Así que imagínense: para mí es una tortura ver estas películas. Son tan buenas, que no quiero dejar de ver. Y si sigo mirando, vomito. A eso le sumamos el suspenso y la tensión que generan y estoy en el horno.
El tema es que por eso tardé tanto en ir a ver [●REC]. Y ahora que fui y me maree, digo: valió la pena. Posta.

Pensamientos bestiales del caso:
  • ¿Qué tienen los españoles que hacen películas de terror del carajo?
  • La protagonista, Manuela Velasco, la rompe. No es fácil actuar bien cuando el ochenta porciento de tu papel es gritar y correr manchado de sangre. Si a eso se le suma que el personaje de Ángela, si bien la protagonista, aparece al principio como una periodista bastante egocéntrica y falsa, el logro de Velasco (hacer que me importara, y mucho, el futuro de Ángela) no es moco de pavo.
  • Es genial lo que hacen con la nenita. Pensaba que iba a ser la típica: iba a morir la madre y la protagonista la salva. Lo que hicieron en la película no tiene nada que ver.
  • ¿Por qué la loca vieja tenía acento argentino?
  • La manera en que [●REC] logra hacer entender la gravedad de la situación a los espectadores, mostrando sólo la tela blanca que cubre todas las ventanas y entradas, es inquietante y genial.
  • Las vueltas de tuerca nunca resultan forzadas. De hecho, como toda buena vuelta de tuerca, me sorprendieron. No por extremadamente originales, sino porque la película me capturó tanto que vivía momento a momento la acción y no tuve tiempo para ponerme a pensar "¿qué va a pasar ahora?". No quiero sonar como un afiche cualquiera, pero eso es una película que no respiro.
  • Voy a IMDB y veo que Velasco va a actuar en El ratón Pérez 2. Hay que comer, gente.
  • Cuando vi Abre los ojos me pasé un mes repitiendo "abre los ojos...". Ahora voy pasarme un mes diciendo: "hagas lo que hagas, no dejes de filmar".
  • Las películas de zombies están a full últimamente. Por favor, que algún Licenciado en Artes me haga un análisis socio-cultural al respecto. Para mí va por el lado del encierro: siempre los sobrevivientes quedan cercados. De a uno, van muriendo. El final siempre es trágico. No como en las películas de vampiros, donde siempre le clavan la estaca a Drácula en el corazón. Los zombis son más hardcore: no tienen romanticismo barroco, ni esa onda gay de Anne Rice, ni sexualidad desbordante. Son cuerpos deformes y desagradables, imparables en su sed de sangre y violencia. Y siempre están en películas hechas en países del primer mundo. ¿Coincidencia? (¿vieron? Algo me quedó de hacer media carrera en Filo).

Diagnóstico a los bestia: GO SEE IT NOW.

Dónde la vi: Hoyts Abasto.

Cuándo: Martes, última función de la noche.

Con: Cutti.

Gente: Bastante, especialmente para un función tan tarde un día de semana. Al pobre de Cutti le tocó al lado un idiota que revisaba el celular durante la función. La divina luz naranja iluminaba media sala.

Comida/bebida: Machiatto al chocolate del McCafé para llevar tomando durante la cola para sacar las entradas.

martes, 23 de septiembre de 2008

Cuatro minutos

¿Cómo no vi esto antes?
Quise, pero Cutti no... Y siempre me da un poco de culpa arrastrarlo a películas que pienso no le van a gustar. Lo raro es que generalmente le terminan gustando, y mucho. Como pasó acá.
Es más: le gustó más que a mí. Yo pensé que el guión era bastante desprolijo, y que ciertos elementos de la trama eran inverosímiles, pero concuerdo con él con que el final es FENOMENAL, y con que las actrices la rompen. Y si el objetivo era transmitirle al espectador la opresión y angustia de la vida de los personajes (la profesora de piano de una cárcel y una presa muy, pero muy rea) vaya si eso está logrado. Salí tenso del cine, me dolía el cuello... y eso es para mí señal de un film que me atrapó y me contagió su clima. Bah, más o menos, la verdad es tuvo también que ver que los asientos del Arteplex son pésimos.

Pensamientos bestiales del caso:
  • Cuando Monica Bleibtreu (Frau Krüger, la profesora) apareció por primera vez, no supe si era un hombre o una mujer. Sí, es cruel.
  • Me sorprendió elemento lésbico. Sabía por las críticas que salieron cuando se estrenó la película que era la historia de una mujer y otra "que se había impuesto el encierro por los crímenes de su pasado), pero no me imaginé que ese "crimen" fuera lo que es, y que no voy a decir porque le arruino la película a quien no la haya visto.
  • Pero está bueno que se empiecen a ver lesbianas en el cine, más aún si se trata de una mujer mayor, como Bleibtreu. A los viejos se les niega toda sexualidad en el cine, y más si son homosexuales. Es decir, cuando no son viejos perversos que se babosean con algún pendejo.
  • Me encató cómo está filmada la película. Mucho plano secuencia, mucho clima muy tenso, todo muy bien logrado. Y una fluidez de la imagen increíble.

Diágnóstico a lo bestia:

No es infalible ni mucho menos, pero bien vale la pena si se quiere ver algo distinto y original.

Dónde la vi: Arteplex Centro.

Cuándo: Lunes a la noche (la intención era ver Nuevo mundo, pero saqué por cartelera, y cómo nadie fue a verla pagando precio completo, no me dejaron entrar... como sea, el reemplazo salió bien).

Con: Cutti.

Gente: Casi nadie, como corresponde en un cine arte. Un par de parejas pseudo-intelectuales como uno y nada más.

Comida/bebida: Nada. Sorbos del café de Cutti antes de entrar.

domingo, 21 de septiembre de 2008

Stargate

Sólo unos pocos comentarios bestiales esta vez:


  • Roland Emmerich (el director) es alemán. ¿Por qué insiste en sus películas en transformar los símbolos de libertad norteamericanos en símbolos universales de liberación? EL 4 de julio en Día de la Independencia, el saludo militar acá.
  • Los habitantes del planeta al que viajan los protagonistas lucen como árabes. Cuando se meten en una cueva, se ponen cascos o chalecos de los militares y alzan rifles en alto... todo se parece un poco mucho a esos videos que Al Quaeda hace cuando secuestra a alguien. ¿La vida imita al arte?
  • La película, al margen de todo esto, es divertida. La primera hora, más que la resolución.

Dónde la vi: En el living de la casa de mis padres, en DVD trucho.

Cuándo: Domingo a la tarde.

Con: Mi soledad. Mi viejo se sumó para los últimos cuarenta minutos.

Comida/bebida: Nada (¡todo un logro!)

lunes, 15 de septiembre de 2008

Mamma Mia!

Hay formas de establecerse como un cinéfilo erudito. O, al menos, de parecerse a uno. Esta no es una de ellas.

Primero Superhéroes, la película, y ahora Mamma Mia!

Pero la realidad es que son las películas que ví, en el cine. Y soy tan honesto que hasta voy a seguir hundiéndome: esta fue la segunda vez que ví Mamma Mia! Sí, señores, como lo escribo.
Ahora que ya abrí el paraguas, puedo decir por qué. Jamás le había prestado la más mínima atención a ABBA. Mucha gente tiene a su música asociada a la dictadura. Yo ni eso. Conocía “Dancing Queen” y “Mamma Mia” (¿quién no?), y recuerdo un capítulo de That 70’s Show donde cantaban “Fernando”. Pero poco más.
Lo que sí me encanta son los musicales. Los profundos y los idiotas. Mamma Mia! es lo segundo, y con orgullo. Justamente eso es su encanto: es una monumental tontería hecha con absoluta consciencia del crimen. La trama importa poco y nada, y está sólo porque algo tiene que unir (más o menos, algo, aunque sea) los números musicales. Que ni siquiera son impecables. Nadie aquí canta como los dioses, ni baila genialmente. Mamma Mia! es más bien un pastiche que eligió poner a estrellas súper famosas y súper respetadas a hacer algo más parecido a un karaoke que a un musical de Broadway a todo trapo.
Ése es el enorme disfrute, también: el derroche de energía, la idea de que uno ha hecho las mismas ridiculeces que ve en pantalla en alguna fiesta, borracho.

Pensamientos bestiales del caso:

  • Meryl Streep es una genia. Que es una actriz fabulosa se sabía de sobra. Pero que haya hecho esto la corona como una mina copada. El hecho de que una actriz seria haga algo así es la mitad de la gracia, lo que hace que Mamma Mia! sea un capítulo de Todo por $2 con mucho más presupuesto. E igual de disfrutable, ridículo, absurdo, que el ranking de canciones de aquél programa.
  • Pero Meryl se la banca. Cuando hay que ser tonta y ágil y juguetona, lo es, y resulta encantadora. Y cuando la trama (o lo que la película tiene que se parece a una trama) demanda un poco más de seriedad, esta mujer se lo toma en serio y deja todo en la escena. El cuerpo, la voz, el alma. Porque sí: Mamma Mia! es una monumental tontería, pero jamás falla en lograr la emoción que busca. Cuando quiere ser divertida, lo es. Cuando quiere emocionar, lo hace.
  • Es sólo cuestión de tiempo hasta que los travestis del mundo empiecen a imitar a Meryl cantando “The Winner Takes It All”.
  • Colin Firth es puro encanto. Una pena que apenas hace algo en la película.
  • Pierce Brosnan no puede cantar. Ni siquiera de una manera “canta-no-tan-bien-pero-funciona-porque-es-buen-actor”. Cada vez que cantaba, yo rechinaba los dientes.
  • El coro griego (literalmente griego) es genial.
  • No sé si es el mejor número, pero cuando Christine Baranski canta “Does Your Mother Know?”, no podía dejar de reírme.
  • Julie Walters es otra grosa. Tiene que hacer de la vieja-solterona-medio desesperada por conseguir un hombre, y se la re banca. La admiro no sólo por actuar bien, sino por cargar con ese rótulo con tanto orgullo. No debe ser fácil.
  • Las escenas post-créditos de la películas son fabulosas. Están ahí arriba con los grandes momentos musicales del cine hollywoodense de los últimos años: el epílogo de Virgen a los cuarenta y el inicio de Música y letra.
  • Se darán cuenta que no comparo la película con musicales “serios” (Rent), ni con los que se pretenden serios (Hairspray). No es por nada. Adoro las versiones teatrales de Rent y de Hairspray, y la versión cinematográfica del primero no estaba nada mal. Pero Mamma Mia! es una propuesta mucho más honesta y menos pretenciosa. Y por eso, más divertida.

Diagnóstico a los bestia:

Ir lo más pronto posible. Disfrutarla sin culpa.

Dónde la vi: Multiplex Belgrano.
Cuándo: Domingo a la noche.
Con: Cutti, Lucrecia y Lili-fan.
Gente: Poca. Menos homosexualidad que la primera vez. Pero menos no significa nadie: el señor del pañuelo en el cuello a mi derecha tarareó todas las canciones. Claro que también lo hizo Cutti, y Lucrecia directamente quería bailarlas.
Comida/bebiba: Una coca y manotazos de las Saladix se Cutti.

viernes, 12 de septiembre de 2008

Superhéroes, la película

Se inaugura el blog!

Y como empezar con el pie derecho haría las cosas demasiado fácil, empiezo embarrándola mal: Superhéroes, la película.
Primero que nada: no es tan mala como uno pensaría. Sí, es escatológica. Pero tiene una trama bastante coherente (mucho más que las Scary Movie), y a pesar de la simpleza de los chistes, me reí más de una vez. No demasiado fuerte, y no me siento orgulloso de ello, pero me reí.

Pensamientos bestiales del caso:

  • Sarah Paxton (la chica en cuestión) es el equivalente norteamericano de Paula Robles. Cero onda. La veo y me aburro.
  • Drake Bell, el protagonista, es tan lindo que me distraía de la trama de la película. O quizás sería que más de una vez verlo a él era más interesante que el chiste del momento.
  • ¿Por qué los mejores chistes de la película estaban después de los títulos como outtakes?
  • La película debió haberles salido baratísima. Que sea una parodia no hace que me molestaran menos los maniquíes que pretendían pasar por cadáveres. Ese chiste sólo me resultaba gracioso en Married with Children.
  • El póster es una mentira. Regina Hall no hace de Tormenta. Pamela Anderson aparece en una escena. O al menos lo hace su escote.
  • ¿La pistola desnuda me da más risa porque la vi mil veces de chico y la tengo conectada con mi infancia… o porque es mejor película? Porque la verdad es que salvo los escatológicos, los chistes de una podrían estar en la otra.
  • No, eran los actores la diferencia. Drake Bell (por más lindo que sea) no es Leslie Nielsen. Ni Sarah no-sé-qué es Priscilla Presley. Y mucho menos el mejor amigo negro es ese otro mejor amigo negro que después fue a juicio por matar a la mujer.
  • Además, la gracia de Leslie Nielsen era que antes de ponerse a hacer parodias, había hecho las películas de las que ahora se burlaba.
  • El imitador de Tom Cruise es genial. Lo mismo el de Stephen Hawking.
  • ¿No había una mejor película para tomar como centro de la parodia que El hombre araña? Iron Man, X Men, Hulk, Los cuatro fantásticos… No, no había.
  • ¿Por qué de Batman sólo parodiaron la escena en que los padres de Bruce Wayne mueren en el callejón? Esa escena es del primer Batman de Tim Burton, que fue hecho en... 1989.

Diagnóstico a lo bestia:

Pasable. No la hubiera visto ni de casualidad si no le tocaba a Cutti elegir película esta vez.


Dónde la vi: Hoyts Abasto
Cuándo: Jueves a la noche (sí, el día del estreno… y lo admito)
Con: Cutti.
Gente: Poca. A mi izquierda, parejilla intelectual (se habrían perdido camino al festival alemán del Village). El chico sentía la necesidad de comentar en voz alta los chistes de la película. Esa gente que cuando un personaje dice “Fruitcake?” y le parece gracioso, lo repite entre risas. También hicieron acto de presencia algunos post-adolescentes con sus nachos y cocas pequeñas (2 litros y medio)
Comida/bebida: Un cuarto de helado de Freddo durante las propagandas.